B El médico del Dalai Lama explica las claves del bienestar físico

Una jovencita se atrevió a hacer una pregunta al médico del Dalai Lama, y recibió una respuesta inusual.

 

Tsweang Tamdin, experto en medicina tibetana y de renombre mundial, visitó el lunes la Universidad Emory en Atlanta como parte de sus esfuerzos por llegar a más médicos estadounidenses. Quiere desarrollar proyectos de medicina occidental en colaboración con el sistema de medicina tibetana que tiene más de 2.500 años de antigüedad.

La niña le dijo a Tamdin que tenía asma. Quería saber si la medicina tibetana tenía algo que pudiera ayudarle a mejorar. Tamdin, quien recurrió a los servicios de un intérprete durante la hora que duró la conferencia, de inmediato habló en inglés. En un tono gentil, casi demasiado suave, le explicó que le podía ayudar.

 

Dijo que los inhaladores que los médicos recetan funcionan bien, y le aconsejó seguirlos usando si ya lo estaba haciendo. Sin embargo, el inhalador sólo trata los síntomas. Explicó que la práctica médica tibetana intenta llegar a la raíz del problema.

 

“Mientras que otras personas consideran a la medicina holística tibetana como medicina alternativa o una especie de disciplina auxiliar, me gustaría que las personas ajenas a nuestro sistema consideraran al sistema curativo tibetano como una sanación integral”, dijo Tamdin. “El saber de la medicina tibetana tiene un tremendo potencial que agregar a la medicina moderna”.

 

La medicina tibetana sostiene que la gente se enferma cuando el bienestar físico, psicológico y espiritual está en desequilibrio. Para recuperarlo, Tamdin recomendó a la niña que hiciera cambios en su dieta y su régimen de ejercicios. La animó a descansar y a hacer ejercicios que favorecieran la respiración profunda, como saltar o andar en bicicleta. También sugirió que comiera tres o cuatro pasas blancas al día, pues dijo que esta fruta tiene una propiedad que ayuda a la respiración. Finalmente dijo que el mayor sacrificio que podía recomendar a un niño era evitar los alimentos fríos, en particular el helado.

 

Tamdin relató que otro paciente que acudió a él con síntomas de asma obtuvo un diagnóstico muy diferente. La enfermedad se trata de forma diferente de un paciente a otro. Eso se debe en gran parte a que la medicina tibetana tradicional se basa en la filosofía budista. En su preparación como médico, Tamdin también estudió tradición budista y astrología.

 

Los médicos estadounidenses y tibetanos tienen métodos en común. Tamdin dijo que si examinara más profundamente a la niña, le haría exámenes de diagnóstico conocidos. Examinaría una muestra de orina y le tomaría el pulso, pero también le preguntaría cosas que corresponderían más a un psicólogo. Trataría de descubrir si la persona está enojada o ansiosa o si alguien se está volviendo demasiado egoísta.

 

“Los tibetanos creemos en nuestra interconexión”, dijo Geshe Lobsang Negi, un exmonje que ahora dirige la sociedad Emory-Tibet. “Cuando perdemos esa perspectiva —de que somos una especie de punto que se conecta infinitamente con el resto del mundo— cuando nos vemos como el centro sólido, fijo y más importante del universo, a eso le llamamos ignorancia y eso significa que somos vulnerables a las enfermedades”.

 

Este enfoque de la persona integral de la medicina tibetana está siendo analizado en varios estudios a lo largo de Estados Unidos. En un estudio patrocinado por el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos (NIH por sus siglas en inglés) se examina el efecto que puede tener la meditación de la compasión para aliviar la depresión.

La meditación de la compasión es un entrenamiento mental tibetano budista en el que se le pide a la persona que examine por qué se siente de cierta forma acerca de alguien y entonces desarrolle sentimientos de amor y empatía por una determinada cantidad de personas que aumentará conforme se adquiera experiencia hasta incluir alguien que normalmente le desagrada.

 

Los estudios han demostrado la efectividad general de la meditación. En un estudio realizado en 2003 sobre la meditación basada en la conciencia se demostró que después de recibir la vacuna contra la gripe la producción de anticuerpos aumentaba.

 

En otro estudio realizado ese mismo año se descubrió que los enfermos de cáncer que tenían preparación en la reducción del estrés basada en la conciencia presentaron un fortalecimiento de su sistema inmunológico. Además, un estudio realizado este año por la Universidad Carnegie Mellon demostró que la meditación basada en la conciencia tiene una influencia profunda en la salud psicológica y física. La conciencia implica estar presente y en el momento, observando sin juzgar.

 

El estudio que Negi realizó en 2008 acerca de la meditación de la compasión demostró una reducción de las respuestas inmunológicas y conductuales inducidas por estrés. En varios estudios más que se están llevando a cabo se analiza el efecto de los tratamientos tibetanos en ciertas enfermedades virales y hepatitis.

Tamdin cree que la ignorancia es la causa principal de todas las enfermedades.

 

“Tiene sentido si lo piensas”, dijo Negi. “Por ejemplo, si crees que eres el centro del universo y que alguien tiene algo que tú quieres, puedes sentirte celoso y creer que te mereces eso que la otra persona tiene”. “Puedes llegar a sentirte tan celoso”, agregó, “que no dormirás en toda la noche y te sentirás estresado. Las pruebas clínicas han demostrado que se da un cambio bioquímico en tu cuerpo, desencadenado por una hormona del estrés. En la medicina tibetana, es importante reconocer el papel que la mente puede jugar en tu propio bienestar físico”.

 

Tamdin dijo que la medicina moderna trata los síntomas, pero dijo que un paciente nunca mejorará si no atiende sus problemas psicológicos. “Si uno no alcanza el entendimiento del altruismo no podrá derrotar a su ignorancia”, dijo. “Una forma de verlo es observar al ave y a su sombra. Puede volar y volar muy alto en el cielo, pero sigue proyectando una sombra en la superficie terrestre. Mientras en tu interior haya ignorancia, aunque goces de buena salud, siempre te acechará la sombra de la enfermedad. De esta ignorancia surgen tres venenos mentales: el apego, el odio y el engaño”. Todos los cuales afectan la energía, dijo.

 

Además de la medicina tradicional y los cambios en la dieta, un médico tibetano podría recetarle a un paciente que demuestre más gentileza y compasión hacia los demás o que practique más meditación de la compasión.

 

La medicina occidental se muestra renuente a aceptar la idea de la medicina tibetana de que algunas enfermedades inexplicables pueden ser causadas por el karma de una persona o los malos espíritus. El lenguaje que los médicos tibetanos usan para insinuar que la buena salud se basa en el equilibrio de la bilis, la flema y el viento puede parecer demasiado ajeno para quienes practican la medicina moderna.

 

Sin embargo, el enfoque holístico sobre la salud del paciente –tratamientos que contemplan la dieta, el comportamiento, medicamentos y ejercicios contemplativos— podría seguir atrayendo a los médicos una vez que se les demuestre que estas terapias funcionan.

 

“La tradición tibetana ha evolucionado a lo largo de 2,500 años”, dijo Negi. “Tiene una rica tradición que ha ayudado a la salud de las personas durante muchos, muchos años. Su Santidad el Dalai Lama fue el primero en decir que esas cosas que creemos deberían someterse a las herramientas científicas para que pudiéramos entender mejor la condición humana en general y ayudarnos a lidiar con nuestro propio bienestar”.

 

F Una mayor cantidad de fibra alimenticia podría ayudar a prevenir el accidente cerebrovascular, según un estudio

 

Algunas medidas sencillas serían añadir fruta y verdura a la dieta, afirman los expertos.

Comer más alimentos ricos en fibra aparentemente reduce el riesgo de accidente cerebrovascular (ACV), según un nuevo estudio británico.

Por cada 7 gramos que se consuman de fibra al día, el riesgo de un individuo de sufrir un ACV inicial parece descender un 7 por ciento, concluyeron los investigadores tras analizar las investigaciones llevadas a cabo durante más de 20 años.

"Esto es importante porque la mayoría de las personas en EE. UU. no comen suficientes alimentos ricos en fibra", afirmó la coautora del estudio, Victoria Burley, del Centro de Epidemiología y Bioestadísticas de la Universidad de Leeds, en Inglaterra.

"El consumo total de fibra alimenticia a partir de los alimentos debería ser de 25 a 30 gramos al día, pero las personas en EE. UU. ingieren en promedio la mitad de esta cantidad", afirmó Burley.

Para la mayoría de las personas no resultaría difícil aumentar la ingesta total de fibra en 7 gramos al día, concluyó el equipo. Una amplia gama de alimentos que se consumen a diario (como, por ejemplo, una porción de pasta integral más alguna fruta y una porción estándar de tomates) permitiría alcanzar este objetivo, afirmaron los autores.

Los hallazgos se suman a la evidencia establecida previamente que indicaba que el consumo de fibra alimenticia a partir de plantas (lo que incluye la fruta, los frutos secos, las verduras y los granos integrales) puede frenar la acción de los factores claves que aumentan el riesgo de ACV, como la hipertensión y los niveles altos del colesterol (LDL), llamado "malo".

Los ACV se producen cuando un coágulo obstruye un vaso sanguíneo en el cerebro o cuando un vaso sanguíneo se derrama en el cerebro. El ACV y otras enfermedades de los vasos sanguíneos del cerebro son la segunda causa de muerte en el mundo, al provocar más de 6 millones de muertes anualmente y dejar a una gran cantidad de personas con una discapacidad duradera.

"Todo lo que se pueda hacer, por poco que sea, para mejorar la prevención es importante y podría tener un impacto en miles de vidas", indicó Burley. Esto es especialmente cierto para las personas que ya están en riesgo de ACV, como los fumadores, las personas obesas y las que padecen de hipertensión, señaló el estudio.

Para realizar el estudio, publicado en la edición de mayo de la revista Stroke, los investigadores analizaron cuidadosamente los resultados de ocho estudios previos realizados en Estados Unidos, Japón, Europa y Australia. Todos fueron publicados entre 1990 y 2012.

En términos generales, el equipo de estudio descubrió que cuanta más fibra alimenticia se consumía, menor era el riesgo de sufrir por primera vez un ACV.

No obstante, los investigadores no fueron capaces de desentrañar qué alimentos en particular, ricos en fibra, podrían ofrecer el mayor beneficio protector, dada la falta de datos específicos sobre los alimentos en los estudios revisados. Se necesitaría más investigación para elaborar una lista de la compra ideal para la prevención del ACV.

Además, el análisis solo examinó los posibles beneficios de la fibra obtenida directamente de los alimentos, más que de los complementos, "de modo que no podemos afirmar que los complementos de fibra proporcionarían los mismos beneficios que los alimentos ricos en fibra", advirtió Burley.

"Aumentar la ingesta de fibra no implica necesariamente un cambio radical de la dieta", enfatizó Burley. "Podría significar solo un cambio del pan blanco al integral, o de las hojuelas de maíz a las hojuelas de salvado".

Unas medidas tan sencillas como estas producen muchos beneficios, afirmó. "Hemos descubierto que el riesgo de ACV se reduce con tan solo un pequeño aumento en la ingesta de fibra, sobre todo si actualmente consume muy poco", agregó.

Lona Sandon, dietista registrada y profesora asistente de nutrición clínica en el Centro Médico Southwestern de la Universidad de Texas, afirmó que la revisión británica "vuelve a lo que hemos estado diciendo a la gente durante años".

"Esto no se trata de salir y comprar algo de Metamucil", aseguró. "Se trata de comer alimentos más sanos y tender hacia una dieta basada en las plantas, porque la gente no come suficiente fruta y verdura".

La fibra está relacionada con alimentos que son sanos por una gran cantidad de razones complejas, así que es difícil afirmar que la fibra sola es la que ofrece esta clase de protección, añadió Sandon.

"Pero, al final, se trata de atenerse a lo básico: comer cuatro o cinco tazas de fruta al día, hacer que la mitad de los granos que tome sean integrales, y ese tipo de cosas", aconsejó. "Si quiere estar sano, sabemos que esto funciona".

 

E Relacionan algunos factores del estilo de vida con la artritis de los pacientes de un estudio

Realizar una evaluación del hábito de fumar, la obesidad y la diabetes puede ayudar a detectar los casos con un mayor riesgo de artritis reumatoide.

Fumar, la obesidad y la diabetes se asocian con un riesgo elevado de padecer artritis reumatoide, según sugiere un nuevo estudio.

Los investigadores afirmaron que sus hallazgos podrían usarse para crear una herramienta de evaluación simple de identificación de las personas con un riesgo alto de artritis reumatoide, una enfermedad autoinmune que provoca dolor, hinchazón, rigidez y la pérdida de funcionalidad en las articulaciones, y que también puede afectar a otros órganos del cuerpo.

El equipo de la Unidad Epidemiológica de Investigación sobre la Artritis del Reino Unido examinó los datos de más 25,000 personas, de 40 a 79 años de edad, a los que se realizó un seguimiento durante varios años. Cuando compararon a 184 personas que sufrían de artritis reumatoide con otras que no padecían la afección, los investigadores hallaron que fumar, la obesidad y la diabetes estaban relacionados con un riesgo mayor.

Los investigadores también descubrieron que beber pequeñas cantidades de alcohol y pertenecer a una clase social más alta se asociaron con un riesgo menor de padecer esta dolorosa enfermedad de las articulaciones.

También se halló que mujeres que tenían más de dos hijos y dieron en el pecho durante un periodo de tiempo menor tenían un riesgo mayor de contraer artritis reumatoide, afirmaron los autores del estudio.

"Los factores que estudiamos nos dan pistas vitales sobre eventos tempranos del proceso que termina con una persona sufriendo de artritis reumatoide. Son cuestiones fáciles de preguntar y que pueden usarse como parte de un programa de prevención", afirmó el autor principal, Ian Bruce, profesor de reumatología en la Universidad de Manchester e investigador principal del Instituto Nacional de Investigación de la Salud de Reino Unido, en un comunicado de prensa de la universidad.

El estudio aparece en la edición del 17 de marzo de la revista Annals of the Rheumatic Diseases.

Aunque el estudio encontró una asociación entre ciertos factores del estilo de vida y el desarrollo de la artritis reumatoide en la población del estudio, no demostró una relación de causa y efecto.

 

O Una prueba del aliento podría predecir el riesgo de obesidad

Funciona al medir el equilibrio de las bacterias en los intestinos, explican los investigadores.

Una sencilla prueba de aliento podría decir si alguien tiene sobrepeso o lo tendrá en el futuro, sugiere un estudio reciente.

 

Según los hallazgos, los resultados de una prueba del aliento estándar utilizada para evaluar el crecimiento bacteriano excesivo en los intestinos también podría informar a los médicos si una persona tiene un porcentaje alto de grasa corporal.

 

El microbioma, o sea los billones de bacterias malas y buenas que revisten al intestino, se puede desequilibrar. Cuando las bacterias malas superan a las buenas, pueden ocurrir síntomas como hinchazón, estreñimiento y diarrea. El nuevo estudio, que aparece en la edición de abril de la revista Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism, sugiere que ese escenario también podría predisponer a la obesidad.

 

Para el estudio, los individuos bebieron un sirope azucarado de lactulosa. Entonces, se recolectaron muestras del aliento cada 15 minutos durante dos horas. También se midió la grasa corporal de los participantes de dos formas. Una fue el índice de masa corporal (IMC), que toma en cuenta la estatura y el peso. El otro método utiliza la conductividad eléctrica de bajo voltaje, que diferencia entre el tejido magro y el graso.

 

Los participantes cuyas muestras de aliento mostraron unos niveles más altos de dos gases (el metano y el hidrógeno) tenían unos IMC más altos y más grasa corporal que los participantes que tenían un aliento normal, o una mayor concentración de solo uno de los dos gases, mostró el estudio. Este patrón sugiere que los intestinos están llenos de una bacteria llamada Methanobrevibacter smithii, explicaron los investigadores.

 

Es posible que cuando este tipo de bacteria asume el control, las personas podrían ser más propensas a aumentar de peso y a acumular grasa, comentó la autora líder del estudio, la Dra. Ruchi Mathur, directora del centro de tratamiento ambulatorio de la diabetes del Centro Médico Cedars-Sinai, en Los Ángeles.

 

Aunque hay otras formas de medir la grasa corporal y el IMC, los investigadores sugirieron que los individuos con un mayor contenido de metano e hidrógeno en el aliento quizás sean más susceptibles a responder a métodos específicos para perder peso en un futuro. "La obesidad no es una enfermedad idéntica en todos los casos", planteó Mathur.

 

Si se confirman los hallazgos del estudio, ciertos tratamientos para perder peso podrían utilizarse en las personas que tienen este patrón del aliento. Una posibilidad, por ejemplo, es que los probióticos, que ayudan a restaurar y a mantener el equilibrio natural de organismos en los intestinos, podrían tener un rol en el tratamiento o la prevención de la obesidad.

 

Pero la ciencia aún no ha llegado a ese punto, advirtieron los expertos.

"Se trata de un estudio importante que observa a las bacterias en el intestino y cómo se relacionan con el IMC", comentó el Dr. Spyros Mezitis, endocrinólogo del Hospital Lenox Hill, en la ciudad de Nueva York. "Mientras más metano e hidrógeno hay en el aliento, más grasa hay en el organismo". Pero "necesitamos más estudios para averiguar cómo las bacterias se relacionan con la creciente epidemia de obesidad, y qué sucede si las modificamos", señaló Mezitis.

 

Es demasiado pronto para comenzar a pensar en los probióticos como un tratamiento para la obesidad, señaló el Dr. Peter Green, director del Centro de Enfermedad Celíaca del Centro Médico de la Universidad de Columbia, en la ciudad de Nueva York. Green usa rutinariamente las pruebas de aliento para evaluar a los individuos con problemas gastrointestinales como la hinchazón, la diarrea y el estreñimiento. "Algunas personas con un crecimiento bacteriano excesivo en los intestinos tienen síntomas, pero otras no, y no estamos seguros del motivo. El significado de los resultados de las pruebas no siempre están del todo claros", comentó.

 

"Se necesita más investigación para realmente definir el rol del crecimiento bacteriano excesivo en todas estas afecciones distintas", planteó Green. "Se trata de un área emocionante de la investigación, pero las pruebas del aliento para medir la grasa corporal no están listas para el protagonismo".

Otro experto discutió las implicaciones de la nueva investigación.

 

El estudio añade a la creciente evidencia de que las pruebas del aliento pueden proveer información sobre nuestra salud, comentó el Dr. Raed Dweik, pulmonólogo de la Clínica Cleveland. "El argumento planteado por los autores es que si cambiamos las bacterias de los intestinos, podríamos cambiar la obesidad, y estas personas no aumentarán de peso con tanta facilidad", dijo. "Si modificamos las bacterias intestinales, podrían perder peso más rápido o fácilmente".

 

El próximo paso es averiguar cómo, o incluso si es posible, dijo Dweik, quien el 25 de marzo publicó su propio estudio sobre el uso de una prueba del aliento para descubrir el riesgo de enfermedad cardiaca.

 

Aceite de Oliva

El Aceite De Oliva proviene y es obtenido de la aceituna que es una fruta.

Se cultiva – desde hace 8 milenios en el área del Mediterráneo, específicamente en lo que es ahora Grecia.

Existen diferentes variedades de aceitunas, y por lo tanto de aceites.

Existen aceites puros, o aceites de oliva, producto de la mezcla de diferentes aceites de olivas.

Es la variedad, o el tipo de aceituna, y el grado de su madurez lo que le da el sabor al aceite.

Las características de los sabores de cada aceituna y su aceite correspondiente, será afectada por una variedad de factores ambiéntales.

·         La región y la composición de tierra de donde proviene el árbol de las aceitunas.

·         El clima; la cantidad de días soleados o nublados, la temperatura durante el cultivo y cosecha. La cantidad de irrigación y de llovizna.

·         La forma y hasta la hora del dia que se recolecta la fruta, tambien impacta al producto final.

Esto son algunos de los factores que diferencian los aceites de oliva de los diferentes países productores.

El aceite extra virgen, es el aceita de mas alta calidad. Es producido manualmente o mecánicamente, sin solventes o aditivos, a una temperatura ambiental que no afecte o degrade el aceite, que tiende a ser menos de 30°C.

La aceituna se macera y se obtiene una pasta. Esta pasta se centrifuga y se obtiene el aceite.

Existen varios términos para categorizar el aceite de oliva, como de primera prensada, o prensada en frío.

Los aceites extra-vírgenes son de contenido acético bajo, de no mas de 0.8%.

Para poder recibir el nombre de aceite extra-virgen, el aceite no puede contener solventes, aditivos o componentes añadidos externos. No puede ser diluido o alterado.

Ademas requiere pasar exámenes químicos y ser sometido a pruebas sensoriales, por personal entrenado y reconocido por el Consejo Internacional de la Aceituna.

El porcentaje de aceite extra-virgen producido varía por países. Su producción es más alta en los países del Mediterráneo, con Grecia produciendo la mayor cantidad, el 80%, seguido por Italia con un  45% y España con 30%.

Aceite virgen, es aceite de oliva en un estado puro sin que sea tratado sintéticamente, sin la adición de sustancias químicas y sin la adición de aditivos.  Es el aceite que resulta de aceitunas lavadas, oprimidas, centrifugadas y filtradas.

Su acidez debería ser menos de 1.5%.

Los aceites extra virgen y virgen al ser sin procesar, contienen más grasa desaturada y fenoles que las otras variedades de aceites de oliva. Estos, componentes grasos son  beneficiosos para la salud, a diferencia de otros tipos de aceites

Producción de aceite de oliva total: España produce 44% de la producción mundial y el 60% de la Unión Europea. El 75 % del aceite proviene de la provincia de Jaén en Andalucía.

La exportación principal es hacia Italia. Italia importa y luego exporta el 21%, En Italia, frecuentemente se mezcla el aceite de oliva procedente de España, con aceite de oliva Italiano y se re-envasa como aceite de oliva producido en Italia.

Luego de Italia le sigue Grecia con 12% de la producción mundial, Siria con 6%.

Otros países  productores de aceite de oliva son los Estados Unidos y Australia.

 

Efectos saludables.

 

El aceite de oliva forma parte integral de la dieta Mediterránea. La dieta Mediterránea se reconoce como una clase de alimentación que produce efectos saludables y beneficiosos al sistema cardiovascular. Esto incluye un efecto positivo a la composición de los diferentes colesteroles.

El efecto beneficioso del aceite de oliva como parte de la dieta Mediterránea fue reconocido y estudiado por Ancel Keys en 1958.

El Dr. Keys noto que los Americanos, después de la 2nda Guerra mundial, que eran los mejores nutridos y alimentados del mundo, tenían una incidencia de infartos cardiacos y de enfermedades cardiovasculares mas alto que los Europeos que acababan de salir de la guerra padeciendo de restricciones calóricas y alimenticias. A partir de esta observación el realizo el Estudio de los 7 países. Este fue el primer estudio donde se reconoció una relación entre la alimentación y enfermedad.

La dieta Mediterránea es una dieta que consiste de alimentos frescos, naturales, y sin procesar. Se consume vinos rojos, quesos y grasa desaturadas, en forma de aceitunas y aceite de oliva.

Las grasas desaturadas incluyen la grasa mono-desaturadas y poli-desaturadas. Son el tipo de grasas que aportan efectos saludables.

 

La composición de las grasas contenida en el aceite de oliva:

acido oleico 55-83%, acido linoleico 3.5-21%, acido palmitito 7.5-20%. Las concentraciones de estas varían dependiendo del tipo de aceituna y su grado de pureza.

Los efectos saludables se deben a la gran concentración de componentes antioxidantes naturales llamados fenoles, que son específicos para el aceite de oliva extra-virgen y virgen. Los fenoles encontrados en estos aceites de oliva, no se encuentran en otras clases de aceites.

 

Estas sustancias anti-oxidantes (fenoles) funcionan para proteger las células del cuerpo.

 

El aceite de oliva contiene mas de 30 compuestos fenoles, siendo su concentración mas alta, en los aceites mas puros.

 

Múltiples estudios epidemiológicos sugieren que el alto contenido de grasa desaturada en la dieta, esta asociado con una reducción en el riesgo de enfermedad cardiovascular.

Según el Depto Agricultura de los EEUU, I cucharada de aceite de oliva (13.5gm) contiene:

  • 119 Calorías
  • 13.5 grasa
  • 0 Carbohidratos
  • 0 Fibra
  • 0 Proteína

 

 

El compuesto anti-oxidante principal (fenol) contenido en el aceite de oliva que se piensa es el responsable por los efectos  beneficios se llama hidroxitirosol.

 

Hidroxityrosol (2-(3,4-Di-hydroxyphenyl)-ethanol o DHPE) es uno de los compuestos fenólicos mas importante del aceite de oliva extra-virgin. El DHPE inhibe agregación plaquetaria así como la formación de reacciones pro-inflamatorias por la formación de eicosanoides (thromboxane B2).

 

Esta dos ultimas sustancias con nombres difícil de pronunciar, son sustancias importantes en el desarrollo de las cascadas de inflamaciones crónicas dentro de nuestros cuerpos. Son sustancias que forman los coágulos en nuestro tracto sanguíneo.

 

El oleocanthal es otro fenol encontrado en aceite de oliva que funciona como un inhibidor de la ciclo-oxygenasa (COX). La ciclo-oxygenasa es otro componente pro-inflamatorio asociado con artritis y otros procesos inflamatorios.

 

Inhibición de la enzima ciclo-oxygenasa por el oleocanthal, es parecida a la función que hace los medicamentos analgésicos no-esteroides como la ibuprofeno.

Estas funciones producto del aceite de oliva, son funciones anti-inflamatoria,  y anti-tromboticas, y contribuye a los efectos beneficios del aceite de oliva.

 

La oxidación de los componentes de colesterol produce los daños a nivel de la células de los vaso arteriales sanguíneos resultando en arteriosclerosis.

En adición a los efectos anti-inflamatorios, el aceite de oliva se ha visto que mejora los niveles de colesterol total.

 

Eleva el colesterol “bueno” o HDL.

Controla la oxidación del colesterol “malo”- LDL.

 

Otro beneficio saludable del aceite de oliva es que aparenta poder desplazar ácidos grasos pro-inflamatorios omega-6, sin impactar ácidos grasos saludables omega-3. Esto hace que el aceite de oliva ayude a mantener y produce un balance saludable entre ambos tipo de ácidos grasos omega.

 

El aceite de oliva reduce niveles de azúcar sanguínea y presión arterial por medio de dilatación arterial.

 

El aceite de oliva es una fuente de vitamina E, A, D, K, carotenoides, oleuropein y múltiples compuestos fenólicos.

Estudios epidemiológicos sugiere que el aceite de oliva tiene un efecto protector contra varios tumores cancerosos. Cáncer de la mama, próstata, endometrio y tracto digestivo.

 

Se piensa que es el tipo de grasa y no tanto la cantidad de grasa consumida que resulta en la reducción en la incidencia de los diferentes tipos de cáncer.

 

Ademas del Estudio de los 7 Países, a través de los años se han realizado un sin numero de estudios en diversos países, por universidades académicas y como estudios científicos. Todos han resultado y concluido con los efectos saludables de las grasas desaturadas, específicamente los hallados en el aceite de oliva.

Varios meses atrás, el consejo Europeo de Seguridad Alimenticia, (CESA o EFSA en Ingles) luego de revisar estudios realizado sobre efectos saludables del aceite de oliva, aprobó la siguiente proclamación: “El consumo de aceite de oliva y sus polifenoles contribuye a la protección de grasas de daños oxidativo”.

Esta declaración principalmente fue el resultado de la conclusión de otro estudio que se llevo a cabo en el Hospital del Mar de Barcelona, por la Dra. Maria Isabel Covas, directora del grupo de investigación Cardiovascular y Nutrición.

La Dra. Cova, y sus colegas realizo un estudio a través de 5 países Europeos, llamado el estudio Eurolive. A los participantes del estudio se le dieron a tomar 25ml al dia, de 3 clases de aceite de oliva parecidos, pero con concentraciones variadas de contenidos fenoles.

Se pudo demostrar un aumento en las concentraciones de colesterol bueno (HDL) en proporción directa al contenido de fenol.

Al igual, se demostró una disminución en la oxidación de grasas (una de las principales factores de riesgo para enfermedades cardiovascular) en relación inversa al contenido de fenoles.

Debido a los hallazgos de este estudio la CESA pudo concluir la relación benéfica en causa y efecto con el consumo de fenoles provenientes del aceite de oliva y la protección que le provea a las grasa “malas” (LDL) de daño oxidativo. 

Ademas de los beneficios CV y anti-cancerosos del aceite de oliva  controla inflamacion y modula el sistema inmunológico.

 

Friendo con aceite de oliva.

Según el Instituto Americano de Investigación del Cáncer, la mayoría de las comidas fritas se fríen entre 250-350 F.

El punto de humo de aceite de oliva extra virgen (smoking point), es mas alto que muchos de los demás aceites en 410 grados F.

Esto permite que el aceite de oliva pueda utilizarse para cocinar y freír sin que se degrade el aceite, al mismo nivel que otros aceites.

Esto es importante porque cualquier aceite se puede convertir en grasa dañinas para la salud o los denominados trans fats, cuando se calienta por encima de su punto de cocinar, que tienden a ser menor en otras clases de aceites, que no sea de oliva.

Como se sabe, el contenido de polifenol en el aceite de oliva protege al aceite contra oxigenación. El cocinar con aceite de oliva, no destruye el contenido de fenoles.

Al freír con aceite de oliva, el contenido de polifenoles se reducen por ½.

Al refreír se produce otra reducción de los polifenoles a un 18-20% de su contenido original.

Y hay que recordarles, que se debe evitar el re-utilizar más de 2 veces cualquier aceite incluyendo los aceites de oliva.